Tienen algo estos días que es diferente...será que empieza a oler a verde, que las mangas se acortan, que las cañas saben más frescas, que la arena vuelve a estar tibia, que los días tienen más horas, que las noches tienen menos sueño...
Tienen algo estos días que es distinto... La Santa Semana...que no la Semana Santa. La Pasión... pero la terrenal, la de cada día, la de la carcajada.
Estos días diferentes nos sirven para guardar los abrigos y la mala energía. Para sacar las vibraciones de manga corta y las alegrías con escote. No tapamos la picardía con bufandas, ni nos guarecemos de la vitalidad. Metemos la pereza en el congelador hasta el otoño y nos compramos despertadores un poco más impuntuales para la rutina.
Días diferentes para sueños diferentes. Días distintos para cada hoja que nace.
Diferentes formas de vivir, de ver la vida y de sentir el aire fresco y nuevo. Un filtro distinto que teñira la playa y mis ojos de primavera.
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